Interesantísimo extracto de entrevista al padre Malachi Martin, en el que resalta el papel del arzobispo Marcel Lefebre y la FSSPX. Recordamos a los lectores que Malachi Martin tuvo acceso al 3er Secreto de Fátima.
“todos los días bendigo al Señor por habernos dado al arzobispo Lefebvre”
Transcripción de la entrevista:
Entrevistador -Vamos con un asunto que está relacionado con la Misa, y especialmente con la comisión Ecclesia Dei; y es el de el apostolado del arzobispo Lefebvre. Bien, éste (el apostolado) estaba fundado… es interesante que hemos estado debatiendo sobre el sacerdocio y la Misa, porque el apostolado del arzobispo Lefebvre fue fundado básicamente sobre la idea de defender el sacerdocio y la Misa. ¿Cúal es su punto de vista sobre el asunto del arzobispo Lefebvre?
M.M. -Bien, debo decirle: todos los días bendigo al Señor por habernos dado al arzobispo Lefebvre; porque, no importa qué debates o excesos pueda haber en alguna manera en la sociedad de San Pío X, la sociedad que fundó, el instituto que fundó, hay una cosa que han asegurado, que la Iglesia tiene una pequeña, pero definitiva reserva de sacerdotes ordenados válidamente, que dicen Misas válidas, y escuchan confesiones válidas.
Y para mí eso es un boom de la mano de Dios; esto no puede ser trabajo de Satán. Satán no hace eso. Es bastante obvio que es tirarse piedras contra su propio tejado. Así que doy gracias a Dios por Marcel Lefebvre; y creo que por providencia de Dios, fue mantenido fuera del Concilio Vaticano, justo para contrarrestar de una manera muy aguda, abrupta y remarcable la progresiva corrupción de la Iglesia en el acto central de adoración.
Así que creo que es una bendición, y creo que fue enviado por Dios, francamente.
Entrevistador -Creo que otro beneficio que el arzobispo Lefebvre ha proporcionado es que pone presión sobre las autoridades para que hagan concesiones a los buenos sacerdotes con indicaciones…
M.M. -En cuanto a que hagan concesiones es a causa de Marcel Lefebvre; es porque está ahí, como una alternativa. También hay lo siguiente: mientras la gente esté diciendo la Misa válidamente; mientras haya buenos sacerdotes que lo hagan, y buena confesión, entonces la verdad está segura de prevalecer finalmente. Y, no sé, no puedo decirle, porque son muchos, cuántos sacerdotes han pasado por mis manos, que dijeron el Novus Ordo por un tiempo, desde que fue publicado, y de repente llegaron a la conclusión de que mejor cambiar y volver a la que solían decir, o a la que nunca dijeron (algunos eran sacerdotes jóvenes, que nunca conocieron la Misa tradicional); y de modo uniforme, inmediatamente, todo empieza a cambiar en ellos: su noción de la Iglesia, su noción del celo, su noción de la devoción a Jesús, su relación personal con Él. Un hombre me emocionó, me dijo: ahora sé que estoy unido con Él física y espiritualmente cada mañana. No creía eso, dijo, no creía eso. Así que, el efecto de Marcel Lefebvre es inmenso; y recuerde que Dios escribe recto con renglones torcidos, un viejo refrán español.
Y no creo que nadie hubiera podido sacudir la presencia satánica en la Iglesia tanto como Marcel Lefebvre; nadie podría haberlo hecho; por oposición directa, y perseverando. Y además con la bendición de Dios, porque, sabe Vd., él es viable económicamente. Está creciendo en número, así que es independiente de ellos, como Dios ; así que le pueden apretar las clavijas, como decimos en este país. Es económicamente independiente, y en número. Consigue sus propios edificios, sus propios seminarios, sus escuelas propias, sus conventos propios; así que el Señor le está dando esas bendiciones.
Ahora queda por ver qué va a pasar cuando muera; y qué va a hacer Dios. Ahora, estoy bastante seguro de que Dios lo va a bendecir, y dirigirlo a Su manera ; y en ese tiempo puede que haya un cambio en la Iglesia.
Breve biografía de Malachi Martin.
El Padre Malachi Martin trabajó con los más altos dignatarios de la Iglesia Católica, tuvo 3 doctorados y acceso directo al Papa. Eminente teólogo, experto en la Iglesia Católica, ex-Jesuita y profesor en el Instituto Bíblico Obispal del Vaticano; es el autor de libros exitosos, el Vaticano, El Último Cónclave, El Rehén del Diablo, Los Jesuitas y The Windswept House (El Último Papa), entre otros.
Él estaba especializado en teología en Lovaina. Allí recibió doctorados en Idiomas Semíticos, Arqueología e Historia Oriental. También exorcista por más de 20 años del Vaticano.
Como consecuencia estudió en Oxford y en la Universidad hebrea de Jerusalén. De 1958 a 1964 sirvió en Roma dónde era un allegado al renombrado Cardenal Jesuita Agustín Bea y al Papa Juan XXIII. Martin falleció a finales de 1999. Él fue uno de los que leyó el famoso Tercer Secreto de Fátima.
El controvertido sacerdote Católico Malachi Martin no vive en una rectoría, seminario, o cualquier otro lugar para clérigos. En los años 60, después de dejar su trabajo en el Vaticano, obtuvo dispensa de sus votos como miembro de los Jesuitas y comenzó a vivir como un seglar con aprobación canónica. El padre Martin oficiaba la santa misa en privado, pero estaba muy preocupado con la total alteración de “prácticamente todo lo Católico” en las últimas tres décadas (de 1960 a 1990).
Su libro más reciente, una novela titulada Windswept House (publicada por Doubleday en 1996), describe las intrigas políticas y religiosas de un pequeño grupo de miembros del Vaticano que ocupan altos cargos y trabajan para que la Iglesia Católica acepte el Nuevo Orden Mundial. La novela describe los esfuerzos de cardenales desleales que trabajan febrilmente para subvertir al Papa y la Iglesia, y no dudan en asesinar, chantajear, y practicar el satanismo.
Me gusta muchísimo todo lo que dice el padre Malachi Martin. Creo que aunque ya murió su visión de la situación actual de la Iglesia es muy clara y exacta. Es un sacerdote muy inteligente y competente. Las entrevistas que he leído son interesantísimas. Su experiencia como exorcista es muy valiosa y la acción que el demonio está ejerciendo desde dentro de la Iglesia, desgraciadamente en muchos miembros de la Jerarquía Católica es aterradora. Todos nos tenemos que poner las pilas y ser ASTUTOS COMO SERPIENTES AUNQUE INOCENTES COMO PALOMAS para poder defender a nuestra Iglesia y al depósito de nuestra fé.
Acerquémonos más a Jesús Sacramentado para que sigamos siendo fuertes en la fé.
Que Dios nos bendiga ya acompañe siempre:
Bárbara Milmo.